{Viñeta - Harry Potter - Jugar con Fuego - SirLy}

Jugar con Fuego
"Agua que no has de beber, déjala correr"

Prohibido. Una palabra que, por sí sola incita a hacer lo contrario.

"Lily Evans esta prohibida". Una frase incitante. Una consigna que no debería pasar por alto.

Sirius no sabe con exactitud cómo, cuándo o qué hora exactamente, comenzó a verla como algo más que la novia de su mejor amigo, su hermano.

No está seguro de si solo le interesa porque ha sido la única como la que no ha tenido un encuentro casual o exista otra razón. Algo más.

Es tarde. Él esa sentado en el barandal del puente, fumando un cigarrillo. Observa a una figura acercarse. Sus pulsaciones aumentan, cuando se da cuenta de quien se trata: Estatura media, curvas proporcionadas, pelirroja, ojos esmeralda. Preciosa, perfecta, simplemente ella. .. Simplemente Lily Evans.

-Evans…-dice, a modo de saludo.
-Sirius-dice ella, siguiendo el juego porque conoce a Sirius, conoce sus juegos de doble sentido –y los que son descarados-. Sonríe. Siempre lo hace, con esa sonrisa medio tímida, medio pícara… encantadora.

La diferencia, es que ella no cae completamente en el juego.

Lily le ha visto el cigarro. Esta vez no le hace un drama, y prefiere pasarlo por alto. En lugar de eso, lo acusa de forma casual:-¿No se supone que deberías estar dentro, estudiando?-

El pelinegro baja del barandal de un salto corto, sin perder el estilo. Da una última calada y tira el cigarrillo a un lado, pisándolo.
-¿No se supone que deberías estar haciendo tu ronda, prefecta?- arremete
-Touché-
-¿Qué haces tan sola, a estas horas y en esta parte del colegio?-Se acercó a ella peligrosamente, obligándola a retroceder
-Misma pregunta-
-Esperaba a que llegarás-

Volvió a caminar hasta ella. Lily repitió su acción hasta que chocó contra el barandal.

-¡Ja! Si, claro- se sonroja un poco. Mira a un lado, nerviosa, mordiendo casi sin querer sus labios. Sirius los mira, saboreándolos.
-Ahora, te toca decirme que haces aquí-
-Quede de verme con Jam…-
-No será importante. Quédate aquí. Podemos pasarla mejor-Su voz es seductora. Habla con mofa (como casi siempre), ocultando la intensión seria.

Lily suelta una risilla inocente, cargada de nerviosismo. Se siente intimidada por Black, pero no cede.

Nunca cede.

-¡Estás loco, Black!-Evita seguir con el juego. Más que nada, porque está segura que algún día –sin querer- podría quemarse- Hazte a un lado, que James me espera-.

Es inevitable que los ojos le brillen cuando menciona su nombre y… joder, así se ve más hermosa todavía.

Sirius accede a su petición. Lily sonríe agradeciéndole y retoma su camino.

El animago la observa alejarse.

Tal vez, es mejor así.